Saliendo por l zona de fogones, bajamos al barranco de Xolí cruzándolo e iniciando la dura subida hasta los Rasos de Catí, descendiendo luego al depósito y siguiendo la carretera asfaltada durante unos 500 metros hasta que nos desviamos por la izquierda, primero por pista y a continuación por senda, hasta enlazar con una zona de pinos que están desbrozando y talando y llegando al bancal de la Misa y a continuación al collado del Tros donde está previsto el almuerzo.
Con el sol brillando en el mar y cielo azul intenso damos cuenta del bocata y algunos "añadidos más" y seguimos marchando por la izquierda de la Foradá, dejando la senda principal, por una secundaria que al final conectará de nuevo con la pista que llega al collado de la Foradá.
Continuamos bajando por la pista en dirección a la Ermita y a unos 200 metros la dejamos y por la izquierda enlazamos con la senda que nos permitirá bajar hasta casa Cancio donde nos encontramos con algunos compañeros montañeros que se están pegando un buen homenaje.
Seguimos bajando para el Calafate y al llegar a la pista nos tenemos que enfrentar a la fuerte subida cementada hasta el collado de Moros. Tras un pequeño respiro buscamos la senda que más a la izquierda de la senda que sube para la Ermita, y ya en bajada, nos lleva hasta la casa Caxuli y su manantial. Volvemos a la senda que en sufrida subida nos llevará de nuevo al cordón por encima del parque natural de Rabosa hasta regresar al refugio y área recreativa del mismo nombre.
Allí el Grupo Senderos nos tenía preparada una "Picaeta" de gran calibre por lo cual, y cómo no, por la bonita ruta les quedamos muy agradecidos.
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