lunes, 7 de septiembre de 2015

2015-08-19 Ruta familiar por Sierra del Bernia

   Clásica ruta por la Sierra de Bernia acompañado por parte de la familia y que gracias a la "adversa climatología" ha resultado una magnífica mañana montañera donde la espectacularidad del paisaje a premiado el esfuerzo.
    Saliendo de las Casas del Bernia y dejando atrás la fuente de su nombre, comenzamos  duro ascenso hasta la entrada del forat. Debido a la suave lluvia un par de pasos por roquedo empinado multiplicó un poco el esfuerzo y la atención a los resbalones.
    Ya en el Forat  "disfrutamos" de su incómodo paso, sobre todo cuando esta húmedo, llegando a la  impactante salida Sur donde los sentidos se agudizan y la emoción del que traspone el forat por primera vez llega a límites insospechados.
    Esa enorme boca de salida enrocada, a esta hora en penumbra, engalanada con verdes hileras de hiedra como si fuera el telón del teatro de nuestros sueños, esas rocas gigantescas a nuestros piés, seguramente caidas hace cientos de años de su vertical pared y como colofón ese brillante mar Mediterráneo salpicado de preciosos pueblos como Altea, Alfaz del Pí o Benidorm, donde la Sierra helada rompe la tranquilidad costera con impresionantes acantilados, son los culpables de nuestro éxtasis.
    Después de almorzar ante semejante delicia, continuamos la larga ruta de aproximación hasta el fuerte, mandado edificar por Carlos V para prevenir la llegada de piratas a la costa, cosa que no consiguió por que cuando querían avisar de que llegaban los piratas, estos ya habían cogido lo que les apetecía en los pueblos y se habían marchado, así que el mismo Rey mandó destruir el fuerte.
    Llegando al fuerte me desvío a la font del fort por si rachaba agua, pues hace 2 meses solo caía un hilito, y como es natural en pleno mes de Agosto ya no salía nada, solo escurría un poco de agua por la pared del nacimiento.
    Después de algunas fotos en el fuerte cambiamos a la vertiente norte de la sierra y ahora ya en cómodo descenso llegamos de nuevo hasta las casas del Bernia donde nos sirven una reponedora comida.
    Y todavía tuvimos ánimos para darnos un rápido baño en la playa de Altea.











































































No hay comentarios:

Publicar un comentario