La sierra de Crevillente ha sido hoy nuestro caballito de batalla. Iniciando la subida al San Cayetano desde la ombría de la sierra, pasada la urbanización de la Montañosa y la fábrica a la derecha de la carretera, giramos a la izquierda por asfalto, en línea recta a la sierra, pasando por dos pistas asfaltadas que van paralelas a la montaña y siguiendo hasta el final del asfaltado donde dejamos el vehículo. Comenzamos la andadura a las 8 y cuarto de la mañana, no muy fría, por el PR que se adentra en el barranco del Sastre, abandonando éste en la primera subida, muy directa al principio, a la montaña. En media hora nos plantamos en el collado entre el San Yuri y el San Cayetano, optando por la subida al segundo en primer lugar. Como en su cima el viento era algo molesto tras unas fotos hemos bajado a los arcos que hay en su último tramo de roquedo para fotografiarlos de primera mano. De regreso al collado seguimos el tramo que por el cordón nos deriva a la cumbre del San Yuri. Una vez arriba continuamos por el PR hasta el collado que lo separa de la Bella y allí optamos por atajar, bajando al barranco dels Anhuers y cruzándolo hasta encontrar de nuevo la senda que nos llevará hasta el área recreativa del Anhuers, donde almorzamos, y tras visitar la reconstruida (casi), Ermita de San Gaetá, reemprendemos el sufrido ascenso de nuevo hasta el collado que ya estuvimos entre el San Cayetano y el San Yuri. Una vez en el collado es como si hubiéramos ganado el cielo, por que el descenso hasta el coche es rápido y fácil, en media hora terminamos el recorrido.
Estupenda mañana por los montes Crevillentinos donde no habíamos estado desde hace más de 3 años.
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