miércoles, 13 de agosto de 2014

2014-07-22 LAS FRONDELLAS

   Después de subir ayer a la Gran Facha, hoy que hay prevista mejor meteorología, nos disponemos a subir a Las Frondellas desde el Refugio Respumoso.
    Hemos comenzado el ascenso por el mismo itinerario por el que se va a Balaitous y hemos dejado ese sendero a la vista del contrafuerte Le Bondidier. Seguimos subiendo dejando también el contrafuerte a nuestra derecha y como ya la nieve comenzaba a empinarse, decidimos ponernos los grampones siguiendo en adelante por todos los neveros que pudimos enlazar hasta el pié de la cresta que a nuestra izquierda y en diagonal era la elegida para nuestro objetivo.
    Unos montañeros que nos precedían, a media cresta se retiraron, comentándonos que no lo veían
muy claro la continuación, pero a pesar de que intenté convencerlos diciéndoles que había que retirarse de la arista un poco más arriba y continuar por unos herberos muy empinados, no conseguí 
que continuaran, así que seguimos nosotros adelante aunque la arista se fué estrechando y empinando mucho, pero por fin divisamos los herberos y con alguna dificultad conseguimos sobrepasarlos y llegar a la cumbre del Frondella.   
    Después de hacer algunas fotos y tomar un tenteenpié, proseguimos al Frondella encontrando casi al final de la arista un paso de II que pudimos resolver. Más fotos en la cumbre y nos decidimos a continuar la arista en dirección al Frondella Norte, donde nos encontramos con alguna dificultad mayor, una chimenea en descenso (que al regreso sería en ascenso) y una diagonal aérea para terminar por una última trepa algo más fácil.
   Las vistas desde Las Frondellas son impresionantes, practicamente se vemedio Pirineo, asi que disfrutamos de lo lindo.
   Regresamos al Frondella Central con la mosca en la oreja de que el retorno por la arista que habíamos subido pudiera ser bastante arriesgado, así que Paco siguió un poco más la cresta para Occidente hasta que pudo entrever que podíamos alcanzar los neveros del Glacial de la Frondella tras unos 15 minutos de riscos y roquedos que nos separaban de las primeras nieves.
  Tras volver a tomar algo un poco más sólido, iniciamos el descenso por la vertiente de los Lagos de Arriel, y una vez que llegamos a la nieve, con los grampones ya tan solo tuvimos que echarle horas al recorrido. Por cierto, encantador sendero que recorre los lagos y que nos retornó al refugio del Respumoso tras más de 11 horas desde que partimos por la mañana.